A continuación se transcribe un modelo de carta dirigida al Obispo que
en su Diócesis no haya aun designado un exorcista. Es importante que los
laicos le hagan saber de la carencia, fundamentando su pedido. La carta
puede ser completada con otros datos, y adecuada a la localidad y
Obispado de que se trate.
Lugar y fecha
S.E.R. MONS. NNNNNNNOBISPO DE (LOCALIDAD)
S/D
NNNNNN
(Nombre y apellido de la persona que se presenta), con Documento de
Identidad NNNNNNNNNNN, fiel laico de la diócesis con domicilio en calle
NNNNNNNNNNNNNNNNNNN, ante S.E.R. se presenta y como mejor proceda muy
respetuosamente manifiesta:
Que en ejercicio de mis derechos como fiel laico de la diócesis, dirijo a
S.E.R. la presente, a los efectos de solicitar designe a un Presbítero
como exorcista, para los casos que se puedan presentar en la diócesis.
Que según el Canon 1172 del Código de Derecho Canónico de la Iglesia,
“Sin licencia peculiar y expresa del Ordinario del lugar, nadie puede
realizar legítimamente exorcismos sobre los posesos. El Ordinario del
lugar concederá esta licencia solamente a un presbítero piadoso, docto,
prudente y con integridad de vida.”
La solicitud está dirigida para permitir que el Presbítero designado
realice realizar exorcismos sobre los posesos en el territorio de la
Diócesis, con todas las obligaciones y derechos que le corresponden de
acuerdo al Código Canónico y al derecho particular.
El pedido también se fundamenta en la abundancia de sectas y de laicos
que muchas veces pretenden utilizar el ritual del exorcismo por su
cuenta, o que para concurrir a buscar un exorcista se debe viajar a
otras diócesis distantes. Desde hace algunos años, ciertos grupos
eclesiales multiplican reuniones para orar con la intención de obtener
la liberación del influjo de los demonios, aun cuando no se trate de
exorcismos propiamente dichos. Tales reuniones son efectuadas bajo la
dirección de laicos, incluso cuando está presente un sacerdote.
Conforme a la Carta de la Congregación para la Doctrina de la Fe sobre
los exorcismos, la misma refiere: “El canon 1172 del Código de Derecho
Canónico declara que a nadie le es lícito realizar exorcismos sobre
personas posesas, a no ser que el Ordinario del lugar haya concedido
licencia peculiar y expresa para ello (§ 1), y determina también que
esta licencia sólo puede ser concedida por el Ordinario (Obispo) del
lugar a un presbítero piadoso, docto, prudente y con integridad de vida
(§ 2). Por consiguiente se invita a los Obispos a urgir el cumplimiento
de estos preceptos”.
“De estas prescripciones se sigue que no es lícito a los fíeles
cristianos utilizar la fórmula de exorcismo contra Satanás y los ángeles
apóstatas, contenida en el Ritual que fue publicado por orden del sumo
pontífice León XIII; mucho menos les es lícito emplear el texto entero
de este exorcismo. Los Obispos procuren amonestar a los fieles sobre
este asunto cuando sea necesario”.
El referido documento de la Congregación para la Doctrina de la Fe
consigna que “Por las mismas razones, se ruega a los Obispos que velen
para que –aun en los casos que, excluida la auténtica posesión
diabólica, parezcan revelar algún influjo del diablo– personas sin la
debida autorización no dirijan reuniones en las cuales se hagan
oraciones para obtener la expulsión del demonio, oraciones que
directamente interpelen a los demonios o traten de conocer la identidad
de los mismos”.
El documento, firmado por el Papa emérito Benedicto XVI cuando ejercía el cargo de Prefecto de
la Congregación para la Doctrina de la Fe, concluye afirmando que “Es
necesario recordar lo que la Tradición de la Iglesia enseña respecto a
la función propia de los Sacramentos y a propósito de la intercesión de
la Bienaventurada Virgen María, de los Ángeles y de los Santos en la
lucha espiritual de los cristianos contra los espíritus malignos.”
Todo lo expuesto, justifica y muestra la necesidad de designación de un exorcista en la diócesis
Agradeciendo desde ya su atención, lo saluda con la mayor de las deferencias en Cristo Rey y María Reina
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4 comentarios:
Administrador cree usted que esta carta podria modificarse un poco y podria utilizarse como un pedido al obispo a que se tome en serio los exorcismos. Existen casos donde esta asignado un exorcista en la parroquia, pero este no toma en serio su trabajo y es como si no existiera el exorcista asignado en la parroquia. Gracias
Claro! Puede modificarse y enviarse para informar de una injusticia. Y si el obispo no hace caso, al Nuncio o al Papa de Roma. Me da pena y tristeza los que pudiendo, no ayudan, un día tendrán que rendir cuentas ante Dios.
Aún y así, creo en la misericordia de Dios y por otro medio resuelve los errores humanos.
Dios siempre abre la puerta al que le llama.
Dios nos ama, Dios provee, Dios ES.
Un amigo mío, religioso, ha visto mi comentario anterior y me ha dicho que quizás sea un poco fuerte. Y lo admito, lo es pero si ante una injusticia, o peor por comodidad no se ayuda como se debe, la persona afectada i /o sus familiares tienen derecho a quejarse, yo al menos lo expresó así, porque me pongo en la piel del sufriente desatendido injustamente. No es atacar a nadie, es buscar una solución desde la caridad.
Se de lugares donde habían sufrientes y por las quejas de varios posesos, se nombraron exorcistas, si la gente se calla o no se queja no se pone remedio.
Y esa gente necesita ser atendida.
Nos piden respeto y orden, pero si no hay medios, ?que hacemos? Pues pedir que se actúe dentro del orden, es lo más lógico.
Bueno, quería aclarar esto y desde la caridad.
Pero no se puede mirar para otro lado, porque a nosotros no nos afecte
Bendiciones.
Gracias Administrador por la aclaración. Uno puede quejarse utilizando un poco de diplomacia, pero siempre uno debe buscar encontrar la solucion al problema. Siempre digo que cuando queremos hacer ejercer nuestros derechos como individuos de la sociedad podemos recurrir a los tribunales y ejercer nuestros derechos pero, sin entrar en polémicas, cuando se trata de nuestros derechos como miembros de la Iglesia quedamos un poco desamparados.
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