De como aconteció, que un satánico estaba sentado al lado de un sacerdote católico en el avión, de como odiaba el demonio que lo poseía, y de como Jesús de mi corazón, ayudado por la providencia pedida amorosamente a ese sacerdote, el satánico obtuvo una oportunidad de gracia, la aprovechó, se convirtió y salvó su alma.
Cosas de Dios.

¡Ey, qué buena historia, y el sacerdote muy agradable!
ResponderEliminarGracias por el post.
Dios nos bendiga!!
Si, a ver si Dios me va proveyendo de material, que pueda seguir ayudando a la comprension, desenmascarando el mal, y ayudandonos en su misericordia (aun mas) y que las gentes, escuchen,a cepten y sigan la palabra de Dios en espíritu y en verdad.
ResponderEliminarDios nos bendiga.
Sí, tienes razón. Es muy importante. ¡Yo aprendo mucho en el foro!
ResponderEliminarEs verdad qué buen material.
ResponderEliminarjeje!
Menuda historia, me viene muy bien haberla leido por si algún día me pasa, para saber cómo actuar.
ResponderEliminarUn saludo!
Es una anécdota divertida y con un hermoso final.
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