24 ene 2015

Las almas son de Dios



REVELACIONES A SANTA BRÍGIDA

24 RETÍRATE DE SU PRESENCIA
La Virgen preguntó al demonio: ¿Podrías decirme si los tres pecados de lujuria, gula y codicia pueden existir en un corazón junto a sus buenas resoluciones de contrición, arrepentimiento y propósito de enmienda? El demonio contestó: No. La Virgen dijo: ¿Me dirás, entonces, cuáles tienen que  huir de su corazón, las tres virtudes o los tres vicios que, según tú, no pueden ocupar el mismo lugar al mismo tiempo? El demonio dijo: Digo que los pecados. Y la Virgen agregó: Entonces el camino al Infierno está cerrado para ella y el camino hacia el Cielo le queda abierto. De nuevo, la Virgen inquirió al demonio: Dime, si un ladrón acechara a las puertas de la esposa y quisiera violarla ¿qué tendría que hacer el esposo? Satanás contestó: Si el esposo es bueno y valiente, debe defenderla arriesgando su vida por el bien de ella. Entonces, la Virgen dijo: Tú eres el ladrón malvado. Esta alma es la esposa de mi Hijo, quien la redimió con su propia Sangre. Tú la corrompiste y la atacaste a la fuerza. Por lo tanto, y puesto que mi Hijo es el esposo de su alma y Señor sobre ti, retírate de su presencia.

Nosotros, fuimos creados a imagen y semejanza de Dios, eso sí, tenemos el libre albedrío, podemos elegir, pero los que rechazan el pecado, luchan y se esfuerzan en ser buenos cristianos, un día estarán en la patria celestial.

Esta vida es un paseo, pero también, momento, si queremos, para crecer en virtud y santidad.

Sigamos aprovechandolos, el uso frecuente de los sacramentos la oración, las misas, las ofrendas, las buenas obras, todo lleva a Dios, que nos ve agradecido.

Nuestro SI es importantísimo, para Dios que nos ama y para nuestra alma, así como para ayudar al prójimo a ir hacia la luz de Dios.

Como dice el padre Fortea, no esperemos mas a decir SI a Dios y seguirle, no esperemos a mañana o pasado, ni un minuto, ni un segundo más.


Los tesoros que nos esperan son el ciento por uno ( mínimo ).

Y para toda la eternidad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sencillamente hermoso.